“Si caminas solo, llegarás más rápido. Si caminas acompañado, llegarás más lejos”.
¡¡Qué bonito es no notar el paso del tiempo cuando te acogen , acompañan, felicitan y dicen lo bien que estás (aunque haya días que sientas todo lo contrario), te regalan sonrisas y sobre todo, sientes que aportas!!
Esto ha ocurrido en estos casi nueve meses, donde el tiempo ha pasao’ volao’. Pero ahora, toca detenerse, hacer una pausa para poder valorar y sopesar.
Siendo parte de una entidad nueva para mí, pero cercana (muy cercana), me he replanteado mi rol y quiero compartirlo.
Como profesional, siento la responsabilidad de crear momentos donde no sólo se aprenda, sino se disfrute. Valorar el tiempo desde una perspectiva íntegra: el tiempo del reloj, el tiempo vivido, el tiempo sentido. Solo así puedo sentir que doy lo que recibo; que recalco, es mucho.
El proceso y el fruto de este trabajo es tratar con personas de una diversidad que se escapaba de mi experiencia y ahora, mientras me detengo en estas palabras, puedo tener la certeza de que esa forma de ver la vida y esas ganas de cada mañana se han convertido en un motor.
Ha sido un reto nuevo para mí pero también un punto de partida que no podré olvidar y del cual, sólo puedo sacar lo positivo.
Por ende invito al que o la que lea esta reflexión se cuestione: ¿disfrutas de tu tiempo? ¿Lo inviertes o lo dejas pasar? Ya que, sólo poniendo la lupa en unx mismx podemos mejorar y saber si estamos en el lugar correcto. Esta mirada echada atrás a corto plazo, hace que me de cuenta lo versátil que he podido ser, por el cambio de educandos, y que ese cambio no ha nublado la vocación que siento ni la motivación que comparto en este espacio.
Como educadora, enseño y oriento de la mejor forma que sé y el ciclo de aprendizaje, la mayoría de veces es recíproco, por suerte, no lo contemplo de otra forma: recibo todo tipo de aprendizajes gracias a las personas que me rodean. Formar parte de esta red donde se cree en las nuevas incorporaciones de igual forma que en las antiguas, es muy enriquecedor, a nivel profesional y personal.
Así, esta entidad ha pasado de ser cercana a ser el camino a una nueva oportunidad y donde ahora mismo, sigo creando la mejor versión de la maestra que quiero ser.
Celia Díaz Ramos